domingo, junio 04, 2006

Pascual Serrano: Una obra y un sentido "La verdad en los medios"

El jueves primero de junio, a las 5.30 de la tarde, en los espacios del CELARG, en Caracas, hubo un acto muy especial, la presentación del libro Juego Sucio, del periodista, escritor y ensayista español, Pascual Serrano. La intervención de personalidades, incluyendo a su autor. Palabras escritas, habladas, ideas diversas, todo se amalgamó en un gran acto que apuntó hacia un solo fin: Que la verdad resplandezca en los medios, que la ficción no siga siendo noticia y que la opinión no sustituya a la información.

 

Entre las personalidades presentes se hallaban el ministro de Cultura de Cuba, Abel Prieto, el de la República Bolivariana de Venezuela, Farruco Sexto, representantes del Ministerio de Comunicación e Información, y la siempre grata presencia de los Roberto. Roberto Hernández Montoya, dio la bienvenida a los asistentes en nombre del CELARG; luego, el otro Roberto, Malaver, hizo la presentación de Serrano,  “porque si no hubiese asistido difícilmente lo hubiese presentado, y no le quedó más remedio que hacerlo”, según el estilo de estos intelectuales, comunicadores y humoristas, y luego, Serrano, en su intervención,  se refirió a los orígenes de su libro, a comentar algunos de sus textos y a plantear la necesidad de un periodismo ético en el mundo. Esta edición correspondió al  Ministerio de Comunicación e Información, cedida por el autor y por la Editorial José Martí de Cuba, para su reproducción en Venezuela.  Con pétalos de rosas se procedió a la presentación del libro y el autor firmó algunos ejemplares. Igualmente se encontraban presentes, Gonzalo Gómez e Iván Gil, representantes de APORREA,  galardonado por el Ministerio de Comunicación e Información, como medio alternativo y comunitario de tipo digital, el cual tiene como uno de sus lemas: “Rompiendo el cerco mediático.”

 

Algunos rasgos biográficos de Pascual Serrano, fueron tomados de la obra recién presentada: nació en Valencia, egresado de Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, en 1993. Ha recorrido varios países: México, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Colombia, Venezuela, Argentina, Cuba, Irak, Jordania y Líbano. Fue fundador y redactor-jefe de la revista Voces, editada por Izquierda Unida de España. Fundó la revista electrónica Rebelión y es miembro de los consejos de redacción de las revistas: Mundo Obrero, El otro país y Pueblos. Colabora en una docena de publicaciones latinoamericanas sobre temas de comunicación y política internacional. Es coautor de los libros: Periodismo y crimen y Washington contra el mundo. Es compilador de la obra: Mirando a Venezuela.  Desde diciembre de 2005 es director editorial de Telesur, un canal de TV promovido por Venezuela con la participación de Cuba, Brasil, Argentina y Uruguay, que pretende ser un modelo de comunicación contrapuesto a los medios dominantes del primer mundo. Muchos de sus trabajos se pueden encontrar en www. Rebelión.org y en www.pascualserrano.org

 

A continuación, un fragmento de la obra. Su título: María Teresa Campos y la realidad:

 

“En el programa de María Teresa Campos de Tele 5, informa ésta que el huracán Iván avanza en Cuba destruyéndolo todo y sembrando la muerte a su paso. Una española de vacaciones en Varadero telefonea y sale en directo para decir que allí todo era normalidad. Indignada, María Teresa Campos le dice que sintonice la CNN y deje el canal local, en referencia a la Televisión Cubana; y le advierte que por esa emisora no se iba a enterar de nada. Se le olvida a la presentadora que la oyente estaba físicamente en Cuba y para ver la climatología sólo tenía que abrir la ventana, no poner la CNN. La moraleja es clara, si la realidad no coincide con la CNN ignore la realidad, cierre la ventana y atienda la pantalla.” (pp. 110-111).

 

Otro caso: La mentira premiada.

 

“El pasado año, el premio Rey de España de periodismo, dotado con 6 000 euros, fue concedido al periodista del canal Venevisión Luis Alfonso Fernández por un documental titulado La masacre del centro de Caracas.  Se trata de un reportaje gráfico de aproximadamente diez minutos de duración que recoge las imágenes de varios militantes chapistas disparando con armas cortas desde lo alto de Puente Llaguno en la capital venezolana el 11 de abril de 2002. El audio del locutor del documental recoge expresiones como: “Obsérvese a los pistoleros, a los asesinos, cómo descargan la pistola y la vuelven a cargar, sobre la marcha indefensa”…Las cinco personas que protagonizaron esos disparos fueron encarceladas y enjuiciadas, haciéndose ahora pública su sentencia de absolución…Ellos nunca negaron la autenticidad de las imágenes ni haber sido los autores de esos disparos. Sin embargo, la primera cuestión a destacar es que la fiscalía no les acusaba de ninguna muerte ni de ningún herido, es decir, los denominados “asesinos” en el documental premiado, ni siquiera fueron presuntos porque ninguna de esas balas hirió a nadie…El audio del documental, que simula la emoción del directo, fue añadido por un locutor que nunca estuvo allí, quien leyó un texto preparado por sus superiores, ninguno de los cuales fue testigo de los hechos... Es más, la sentencia también esclarece que los dos muertos de ese tiroteo, junto con una veintena de heridos eran los acompañantes de los acusados. Es por ello, que apresaron posteriormente a ocho de aquellos policías municipales.” (pp. 19-21).

 

Y es éso de lo que se ocupa Pascual Serrano. Se refleja en Juego Sucio: desenmascarar la contra-información,  la relación SIP-Imperio, velar por el derecho de las personas a la información veraz, que se respeten los hechos, que no los oculten y que las realizaciones, programas y proyectos de gobiernos como el de Hugo Chávez Frías sean tratados verazmente y no tergiversados, que no se imponga la opinión como información, tal y como ocurre en la gran prensa, (El Nacional y El Universal, entre otros),  en los canales del imperio (tipo CNN), o en los extranjeros disfrazados de venezolanos (Globovisión, RCTV y Venevisión), también manejados por el imperio.

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