domingo, mayo 07, 2006

Tras debacle electoral, laboristas reúnen firmas para solicitar la renuncia de Blair

Londres, 6 de mayo. Parlamentarios laboristas retiraron hoy su confianza al primer ministro británico, Tony Blair, y comenzaron a recolectar firmas de los legisladores para solicitar al jefe de gobierno que fije la fecha de su renuncia al cargo o al menos establezca un cronograma para su salida.

La acción de los legisladores en la Cámara de los Comunes es la respuesta de los correligionarios de Blair a la derrota sufrida en las elecciones municipales del jueves pasado. El partido gobernante perdió 319 concejales (legisladores locales), mientras los conservadores ganaron 316.

"Hay falta de confianza en el gobierno y para recuperarla es necesario que Tony Blair nos diga cuándo se va a alejar y que acordemos una fecha para elegir a su sucesor", manifestó a la BBC Radio la legisladora laborista Geraldine Smith, quien anticipó que el primer ministro enfrentará "enormes presiones" la semana próxima.

El diario The Independent asegura en su edición de este domingo que la solicitud de retiro de Blair será presentada este lunes en la reunión parlamentaria semanal, cuando los legisladores discutan con el jefe de gobierno el tema de los comicios locales.

Los laboristas rebeldes necesitan 70 firmas -una quinta parte de la bancada del partido- para entregar su petición al primer ministro. The Independent revela este domingo que los "organizadores del complot" cuentan ya con 50 firmas.

Frente a la derrota electoral, Blair respondió con una reorganización de su gabinete el viernes pasado, pero sus correligionarios consideraron hoy insuficiente la acción del primer ministro.

Blair, quien fue elegido para un tercer mandato sucesivo en 2005, ha dicho que no va a pelear la próxima elección nacional de mediados de 2010, pero también ha expresado su voluntad por conseguir la aprobación de una serie de reformas en la administración. La más controversial es la que propone dar mayor autonomía a las escuelas frente a las autoridades locales.

En círculos políticos británicos se ha señalado al ministro de Finanzas, Gordon Brown, como el más viable sucesor de Tony Blair.

La reorganización del gabinete y la dirección del Partido Laborista tampoco fue bien recibida por los laboristas. Un total de 13 cargos contarán con un nuevo titular.

"Está tomando decisiones riesgosas que no son buenas para el Partido Laborista y para el país", sostuvo el legislador Graham Stringer, correligionario del primer ministro.

The Independent revela este domingo que la salida del gabinete de Jack Straw, quien era el ministro de Relaciones Exteriores, se debió a presiones del presidente estadunidense, George W. Bush.

El diario basa su información en afirmaciones de "amigos" de Straw, quienes dijeron que su expulsión fue "sellada" con una llamada hecha desde la Casa Blanca. El ahora ex canciller será el nuevo líder de la bancada laborista en la Cámara de los Comunes.

Según esas versiones, Bush llamó "furioso" a Blair porque Straw había dicho que el estadunidense estaba "desesperado" por usar armas nucleares en contra de Irán.

Straw, quien estuvo al frente de la cancillería desde 2001, también había recibido indicaciones desde la oficina de Blair para que "bajara el tono" de su rechazo total a la opción militar contra Irán -a la que el canciller calificó en algún momento de "inconcebible"- y que dejara todas las opciones sobre la mesa, con el propósito de parar el programa nuclear de Irán, tal como ha sugerido Estados Unidos.

Las expresiones de Straw, según el recuento de The Independent, obligaron a Blair a decir recientemente que "nadie habla de una invasión militar", pero tampoco "es el momento de enviar un mensaje de debilidad".

No hay comentarios.: