Colombia: el periódico El Polista llama a votar por Carlos Gaviria y a evitar el fraude uribista en la calle

Llamado a todos los que luchamos por el cambio:

A LA MENOR SEÑAL DE FRAUDE URIBISTA: ¡A LA CALLE!

Hoy 21 de mayo, en esta histórica Plaza de Bolívar, con este histórico acto, estamos cerrando nuestra campaña electoral: ¡CARLOS GAVIRIA, PRESIDENTE!. ¡Estamos a semanas del cambio, que por décadas hemos soñado!. Como ha dicho nuestro candidato, “en las plazas públicas queda claro que podemos ganar” y a lo largo y ancho del país, son muchas las gigantescas concentraciones que, como la del pasado 1° de Mayo en Bogotá, vestida de amarillo en su inmensa mayoría, respaldamos la lucha por el cambio.

Por el contrario, a Uribe le ha ido mal. Ya se ofusca al responder, síntomas muy claros de inseguridad, por que claramente está perdiendo el apoyo, como en la U Javeriana, donde fue rechiflado por la juventud, o en la de los Andes. El llamado de la campaña uribista a la población de pegar los afiches, Adelante Presidente, es un evidente fracaso inocultable, pues no se ven por ningún lado. Una encuesta de abril, mostró a Uribe bajando verticalmente ocho puntos, en solo un mes. Los únicos que lo dan como seguro ganador en la primera vuelta son los grandes medios de comunicación, adeptos a la reelección. Es tal el desespero de los amos y señores, que hasta los banqueros, que le robaron sus viviendas a 170 mil familias, están ofreciendo en estos días de elecciones, créditos como hacía años no se veían en el país, y todo para tratar de crear un clima social favorable a Uribe, pues los mismos banqueros ya anunciaron que esta oferta de crédito, “no será por mucho tiempo”. Los grandes empresarios y terratenientes, para los cuales trabajamos el resto de los colombianos, cierran filas alrededor de su candidato presidente, Álvaro Uribe.

Hace cuatro años, en el 2002, para las elecciones presidenciales, votaron 11 millones 250 mil ciudadanos del censo electoral, el 46,5%. De estos votos, Álvaro Uribe obtuvo 5 millones 863 mil, el 53%. Así gano “de una”. Hoy no existe ni sombra del respaldo de aquellos días de “guerra mundial contra el terrorismo” encabezada por el gobierno imperialista de Bush, días de agresiones militares a los pueblos e invasiones infames, a Afganistán y a Irak. Hoy, Álvaro Uribe solo puede ganar “de una” mediante el fraude electoral, que prepara.

El fraude no es nuevo bajo este Gobierno. Hace cuatro años, como es de conocimiento público, hubo un gigantesco fraude electoral en la costa, orquestado por esa descompuesta institución que es el DAS. El 12 de marzo de 2006, el día de las elecciones del Congreso, Cesar Gaviria denunció que “el paramilitarismo y el dinero fácil jugaron un papel importante en las elecciones”. Por los noticieros de TV, vimos el escándalo de la entrega de tejas y bultos de cemento a los electores y hasta en las Registradurías se perdieron varias curules al Congreso, como lo denunció Guillermo Alfonso Jaramillo.

Por otro lado, las luchas se han profundizado en todo el país. El 1° de Mayo fue masivo en todas partes. Los días 2 y 3 de mayo, estuvo convulsionado Bogotá por el Paro del transporte y el apoyo en los barrios de muchos centenares de miles de bogotanos, cansados de los abusos de las 9 familias “dueñas” del Transmilenio. Asonal Judicial está en Paro indefinido y se extiende a Medicina Legal. Los maestros también entran en Paro y trabajadores de la salud hacen lo propio. Los indígenas, negritudes y campesinos protestan masiva y valientemente en el sur del país, a pesar de la brutal represión, exigiendo cumplimiento de los acuerdo incumplido por los distintos gobiernos de turno. El 22 de mayo, paran los camioneros. Los pequeños transportadores en Bogotá preparan nuevamente la lucha, que contará nuevamente con el respaldo entusiasta de los usuarios. Sin duda, existe voluntad de lucha, entre millones de colombianos.

Hay que tener por lo menos un testigo en cada urna, defender hasta el último voto e impedir que llenen las urnas con tarjetones fraudulentos. El fraude electoral hay que impedirlo con las masas en las calles, a cualquier precio, exigiendo respeto a la decisión en las urnas de los colombianos. No vamos a aceptar pasivamente otro 1970, cuando el Frente Nacional le robó las elecciones a la ANAPO. Hoy es muy distinta la situación y el mundo entero se ha puesto de pie contra los abusos totalitarios de los mandatarios. Cualquier intento de fraude electoral, en cualquier lugar del país, debe unificar la actual voluntad de lucha de millones, que en las calles haremos respetar el veredicto de los colombianos: ¡Uribe tendrá que ir a la segunda vuelta!.

Bogotá, 21 de mayo de 2006.