Presidente Chávez en Cuba: "Cada día crecemos más"

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Chávez, Fidel y Evo... el trio de la esperanza latinoamericana.

Foto: JR

Importante cita entre los líderes de Cuba, Venezuela y Bolivia, a un año del despunte del ALBA. El Comandante en Jefe, Fidel Castro, dio la bienvenida ayer a Evo Morales y algunas horas después, ambos recibieron a Chávez

Marina Menéndez Quintero

Jornada histórica será la de este sábado en Cuba, donde la presencia de los presidentes de Venezuela y de Bolivia augura nuevos jalones a la integración regional. Alentados y acompañados en ese esfuerzo por el Comandante en Jefe Fidel Castro, juntos protagonizarán una cita que Evo Morales calificó de «encuentro de tres generaciones, de tres revoluciones».

El Comandante en Jefe consideró como «extraordinario, de profundo contenido humano, social y económico”, el documento que debe emanar de la reunión, y del cual no dio otros detalles pues todavía lo deben repasar los tres, explicó a la prensa. Pero afirmó que se trata de principios realmente nuevos, y auguró que «van a dar mucho qué decir».

Pudiera pensarse que los primeros intercambios tuvieron lugar ayer poco antes de las diez de la noche allí mismo donde los interpelaba la prensa, y junto a la escalerilla del avión que condujo a Hugo Chávez a Cuba.

Tal era la animación que se adivinaba en el diálogo sostenido por los dignatarios junto a los abrazos de saludo, aún en la pista, adonde Fidel y Evo fueron a recibir a su colega venezolano.

Igualmente fraterna y exenta de protocolos fue la bienvenida que el Comandante en Jefe dispensó al líder del MAS cuando puso pie en La Habana a las 2 y 35 de la tarde. «En mi primera visita como presidente, me siento muy contento, muy feliz de este encuentro que vamos a sostener entre Venezuela, Cuba y Bolivia», dijo entonces Evo.

A la presencia de Morales se referiría el líder venezolano en esta ocasión en que se ha anunciado la adhesión de Bolivia a la Alternativa Bolivariana para los pueblos de Nuestra América (ALBA), y justo cuando se cumple un año de los acuerdos y la Declaración con los que Fidel y Chávez le dieron cuerpo y vida, y plasmaron en blanco y negro sus principios.

«Evo nos acompaña ahora como presidente», destacaría el Jefe de Estado venezolano, luego de afirmar: «Cada día vamos creciendo más; el proyecto de Bolívar se acrecienta y se consolida».

Locuaz como siempre, Chávez también contó sus evocaciones durante el aterrizaje en La Habana, cuando reflexionó acerca de los 12 años que lleva visitando nuestro país. «Desde hace 12 años no hacemos más que crecer, avanzar y triunfar. Estamos venciendo». Esa misma convicción la reiteraría luego con otra frase concluyente: «Estamos en el rumbo. Estamos construyendo».

Otro momento del breve diálogo con los periodistas estuvo dedicado a los Tratados de Comercio de los Pueblos, de los que —enfatizó Chávez— Evo es el creador e ideólogo, y cuyos propósitos este explicó como propiciadores de «un comercio que cree trabajo; para salvar la vida y defender a la humanidad».

Ante la pregunta de si otros países pudieran incorporarse al ALBA, Fidel estimó que un día todos podrían estar, pues no se puede excluir a nadie; y Evo acotó que «los pueblos ya están, los que faltan son los presidentes».

Al asentir, Chávez añadió que los pueblos se han ido sumando progresivamente a la Alternativa Bolivariana para los pueblos de Nuestra América, afirmación que graficó al dar cuenta de la forma en que distintos movimientos sociales de América Latina y alcaldes de Nicaragua incluso, han suscrito convenios en tal sentido con Venezuela.

Explicó Chávez que el ALBA tiene varios niveles de construcción: a nivel de gobierno, pero también en las regiones y localidades.

Distintos ministros acompañan a sus presidentes durante estas jornadas y, en el caso venezolano, 40 líderes de los Liceos Bolivarianos a los que Chávez calificó como «los precursores» y quienes, anunció, intercambiarán con «los muchachos cubanos».

Rodeados aún por los dirigentes del Gobierno y el Partido que acudieron anoche al aeropuerto internacional José Martí, los tres presidentes abordaron juntos el auto que los trasladaría de allí, luego de la camaraderil acotación jocosa del mandatario venezolano: «Ahora voy a manejar, Fidel es mi copiloto y Evo, mi escolta».




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