Quito 08 Ene - Ecuador completa esta semana seis años con una economía dolarizada que aún no satisface a la mayoría de la población, ya que desde la adopción del sistema muchos han perdido el empleo y vieron descender su poder adquisitivo, según analistas citados por la prensa este domingo.
El 9 de enero de 2000 el entonces presidente Jamil Mahuad -derrocado luego por los indígenas- anunció el cambio del sucre al dólar presionado por una hiperinflación del 96,1%, el elevado gasto público y el aumento de los costos de producción.
El gobierno de la época aspiraba que con la nueva moneda se redujeran los egresos estatales y aumentaran las exportaciones, pero al cabo de seis años los resultados no cumplen con las expectativas, indicó el diario El Universo.
"Las cifras oficiales muestran que el presupuesto del gobierno central se triplicó entre el 2000 y el 2006, pues pasó de 2.630,9 millones de dólares a 8.564,5 millones", indicó.
Asimismo, subrayó que si bien las exportaciones aumentaron, lo hicieron a un "ritmo menor que el de las importaciones, lo que provocó que el déficit comercial privado (sin el petróleo) pase de 728,5 millones de dólares en 2000 a 3.168,4 millones a octubre de 2005".
Pero quienes más han sentido los efectos de la dolarización han sido los ecuatorianos comunes, quienes con la nueva moneda redujeron su poder adquisitivo y las posibilidades de empleo, disparándose de paso las cifras de emigración.
"La Canasta Familiar Básica (CFB), hoy de 437,41 dólares, sigue inalcanzable para muchos hogares. Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) si a una familia le faltaban 89,3 dólares para comprar la CFB en el año de la dolarización, ahora le faltan 157,4", indicó El Universo.
Además "el desempleo urbano pasó del 7,2% al 9,8%. Y la migración se presenta como un fenómeno constante", agregó.
Sin embargo los partidarios de la medida destacan que con el dólar la inflación cayó del 96,1% a 4,3% en 2005, así como la reducción de las tasas de interés para los créditos de las grandes empresas al pasar de 15,1% a 8,8%.
Desde que se incorporó la divisa estadounidense, Ecuador se ha batido entre la continuación o derogación del sistema, aunque analistas estiman que el mismo es irreversible.
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